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El desfile, que se ha caracterizado por su sencillez y por ser algo más breve de lo normal, se ha desarrollado en un ambiente tranquilo aunque ha estado marcado, un año más, por la austeridad y los recortes de modo que la parada militar se ha limitado al paso de las unidades a pie y tampoco se han podido ver carros de combate ni "cazas".
Sí que ha contado con las acrobacias de los siete aviones de la Patrulla Águila, único ejercicio aéreo del que se ha podido disfrutar, y cuya participación se ha incluido dentro de sus horas de vuelo y entrenamiento para que no suponga un incremento en el gasto.
El Ministerio de Defensa ha organizado un desfile que ha costado unos 823.000 euros, un 16% menos que el año pasado, y en el que han participado unos 2.600 militares y 50 vehículos, una cifra similar a la del ejercicio anterior.
Entre los partipantes se han encontrado tres militares con discapacidad pertenecientes a la Asociación Española de Militares y Guardias Civiles con Discapacidad (Acime) y uno de la Hermandad de Veteranos.
Cambios en el protocolo
El desfile de la Fiesta Nacional, que ha durado en torno a una hora, ha comenzado pasadas las 10,35 horas en una mañana soleada aunque con temperaturas frescas en Madrid.
Ha arrancado con la llegada de los Príncipes de Asturias a la plaza de Neptuno, donde han presidido, en una imagen inédita, este acto, al que ha asistido el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, así como las más altas autoridades del Estado.
El hecho de que el príncipe haya presidido el desfile militar ha obligado a realizar cambios en el protocolo para ajustar el acto a los honores que la ley establece para el Heredero, diferentes a los que deben rendirse al jefe del Estado.
Así, y tal y como establece el reglamento aprobado en 2010, ha sonado un himno más corto, de 26 segundos de duración, y las banderas que han portado las grandes unidades durante la parada no han respondido al saludo castrense del príncipe, ya que sólo lo hacen ante el Rey
Don Felipe y doña Letizia han sido recibidos con aplausos a su llegada y, entre otras autoridades, por Rajoy, que había llegado poco antes al mismo lugar acompañado de su esposa, Elvira Fernández
En el acto han estado presentes también todos los ministros excepto Luis de Guindos, titular de Economía, los presidentes del Congreso y del Senado y de otras instituciones del Estado como el Tribunal Constitucional.
También han acudido los presidentes de diez de las 17 comunidades autónomas, entre ellos la presidenta de Andalucía, Susana Díaz, que se estrena en este tipo de actos, además de los de las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla.
El Príncipe, vestido de teniente coronel del Ejército de Tierra, ha pasado revista a las tropas y ha saludado a las máximas autoridades. Como novedad, este año, los presidentes autonómicos se encontraban en la primera línea de saludo junto a los miembros del Gobierno.
Homenaje a la bandera y a los caídos
El acto ha comenzado con la interpretación del himno nacional, en versión más breve por cuestiones de protocolo al ser el heredero de la Corona y no el rey como jefe de Estado quien preside el desfile.
Los actos han comenzado con un homenaje a la bandera, que al igual que el año pasado, no ha llegado desde el aire a manos de un especialista de la Patrulla Acrobática del Ejército del Aire, sino a pie, como medida de ahorro.
A continuación se ha desarrollado el homenaje a los caídos. Este año las Fuerzas Armadas han tenido que lamentar el fallecimiento de un militar, concretamente el pasado enero en Afganistán, donde el sargento David Pérez Ureña murió a consecuencia de la explosión de un artefacto improvisado cuando se disponía a desactivarlo.
A los actos del 12 de octubre han asistido las máximas autoridades del Estado. También han presenciado el desfile el presidente del Congreso, Jesús Posada, del Senado, Pío García-Escudero, los presidentes de diez comunidades autónomas, la defensora del Pueblo, Soledad Becerril, el fiscal general del Estado, Eduardo Torres-Dulce, el secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, y los portavoces parlamentarios del PP, PSOE y UPyD, entre otros.
La reina preside la recepción en Palacio
Después de la parada militar, un millar de invitados han acudido a la tradicional recepción en el Palacio Real con motivo del Día de la Fiesta Nacional y que, por primera vez, no contará con la presencia de Don Juan Carlos, convaleciente de su última operación de cadera.
Representantes institucionales y de la sociedad civil, políticos, diplomáticos, militares, empresarios y periodistas compartirán un vino español ofrecido en esta ocasión por la Reina, los Príncipes de Asturias y la Infanta Elena.
Doña Sofía y su hija mayor no han presenciado este año el desfile militar que precede a la recepción y que presidirán en esta ocasión los Príncipes de Asturias. Doña Elena siguió el año pasado la parada desde la tribuna de autoridades, junto al líder de la oposición, Alfredo Pérez Rubalcaba, y no desde la tribuna real donde solía acompañar a los Reyes y los Príncipes.
http://www.rtve.es/noticias/20131012/pr ... 3180.shtml
