Integración de escalas de los oficiales del Ejército

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[align=justify]La dureza de los cursos para la integración de escalas de los oficiales del Ejército provoca abandonos, bajas psicológicas y retrasos para matricularse


Este curso de adaptación no sólo ha traído problemas entre los oficiales de las escalas que tienen que unificarse. Además quienes tienen que enfrentarse a él no encuentran el momento adecuado para incorporarse y cuando lo hacen, por ejemplo, en la Academia de Artillería de Segovia, afrontan un temario excesivo y exámenes que no pueden acabarse en el tiempo reglamentario. Se suceden los abandonos y las bajas psicológicas.

Con la unificación de escalas entre los oficiales de los ejércitos se ha producido un hecho que no era habitual a lo largo de la carrera militar. El número de suspensos en algunos de ellos es tan elevado que apenas si resultan viables.

Es el caso de los cursos de adaptación para oficiales que se han estado dando en la Academia de Artillería de Segovia. Según fuentes del Ejército de Tierra consultadas por El Confidencial Digital, “en algunos de los exámenes realizados entre el colectivo de oficiales el número de suspensos superaba el 65%, algo totalmente anormal”.

En estos casos, los alumnos afectados reclamaron sus exámenes y las correcciones realizadas por los profesores. Algo que no se les concedió generando la duda sobre el alumnado ante lo que podía ser “una corrección del todo subjetiva y no adaptada a la materia impartida”. Además, las notas se facilitaban muy tarde –con retrasos superiores al mes- y los alumnos en ningún momento eran llamados por los profesores para indicarles los motivos por los que habían sido suspendidos.[/align]

Las fuentes consultadas por ECD señalan que ni el temario era el adecuado ni estaba impartido por profesionales en la materia, a pesar de ser oficiales también quienes lo hacían. El tiempo dedicado para realizar los exámenes era insuficiente y la edad de quienes tienen que afrontar el curso también es muy variable. Eso dificulta el aprendizaje de los más mayores.

El resultado de esta ‘saturación’ ha sido, en buena parte de los casos, de abandono del curso y bajas médicas. Algunos además están pendientes de ser retirados de la vida militar. De los más de cien alumnos convocados para algunos de los cursos, a mediados de este mes de mayo tan solo quedaban haciéndolo la mitad.

El sistema pedagógico empleado en el caso de la Academia de Artillería de Segovia, según las fuentes consultadas por este confidencial, ha tenido los siguientes efectos en los alumnos que se han visto obligados a abandonar: subidas de tensión, taquicardias, ataques de estrés y otros problemas psicosomáticos. Además de la “humillación” que supone no ser apto después de más de veinte años de servicio en las Fuerzas Armadas.

En el caso de la Armada, la diferencia más notable respecto al Ejército de Tierra, es que había mucha diversificación en la escala de oficiales: superior, media, especialistas, reserva naval activa y complemento.

Fuentes de la Armada consultadas por ECD señalan que “una de las quejas más extendidas es que a los de Escala Media no se les ha aplicado un coeficiente de corrección. Por regla general sus destinos son más cómodos y sencillos y por tanto las notas de sus informes suelen ser mejores que los de la Superior”.

El temario elegido para hacer el curso de adaptación tampoco es el ideal, según estas fuentes. Lo más lógico, añaden, sería dar las materias y asignaturas que les pueden hacer falta para sus nuevos destinos y “no asuntos relacionados con la Alianza de Civilizaciones o las Políticas de Género”, calificadas por estas fuentes de “ muy progre pero inútil cuando mandas un grupo de gente en medio de un conflicto”.

El enfrentamiento entre las distintas escalas de oficiales está siendo una constante desde que se aprobó su unificación. Los de la superior argumentan que su titulación universitaria no la conseguirán los de la escala media con un “cursillo” mientras que éstos se defienden asegurando que su “experiencia sobre el terreno y responsabilidad” suplen en ocasiones la necesidad de recibir más formación.
Fuente:confidencialdigital

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Defensa advierte que si se paraliza la Ley Militar los daños serían «difícilmente reparables»

PALOMA CERVILLA | MADRID

Domingo , 06-06-10

El Gobierno sabe lo que le puede caer encima si la Audiencia Nacional decide hacer caso a una de las peticiones que han realizado los oficiales de la Escala Superior en los más de veinte contenciosos-administrativos presentados contra la Ley de la Carrera Militar, como es la suspensión de la integración de escalas de oficiales (Superior y de Oficiales) en una única. Por ello, para tratar de defenderse ha enviado a la Audiencia Nacional un escrito, con fecha 4 de mayo, al que ha tenido acceso ABC, en el que la ponen en antecedentes de lo que podría suceder si se paraliza esta Ley. Concretamente, aseguran que si se suspende la integración, los daños serían «dificilmente reparables, en el caso de que el Tribunal Constitucional resolviera a favor de la constitucionalidad de la disposición transitoria cuarta».
Este escrito, enviado por la Secretaría General Técnica, se remite después de que los militares obtuvieran su primer éxito judicial, al detectar la Audiencia Nacional indicios de inconstitucionalidad en dos aspectos de la citada normativa: el curso de adaptación para integrarse en la nueva escala y el reconocimiento universitario del título de grado para quien lo supere.
Escala Superior
Con esta afirmación, el Ministerio de Defensa trata de evitar la suspensión de uno de los aspectos más polémicos de esta Ley y el principal caballo de batalla de los oficiales de la Escala Superior, que consideran que con esta integración se pueden ver superados en el escalafón por otros oficiales con menor antigüedad y méritos en el empleo.
El Ministerio de Defensa justifica su razonamiento de que la suspensión de la integración tendría unos efectos muy perjudiciales para los militares en que, si ello se lleva a cabo «procesos de evaluación y ascenso de los oficiales no pueden detenerse hasta el día en que se pronuncie el Tribunal Constitucional, sino que deben seguir todos los años. Eso obligaría a que los oficiales de la Escala de Oficiales que tenían prevista su incorporación en los próximos años a la nueva escala, dejarán de hacerlo y que su evaluación se produjera dentro de las zonas de escalafón de la Escala de Oficiales a extinguir y su ascenso en esa misma escala».
El Gobierno va más allá y sigue lanzando advertencias a la justicia, en el caso de que el Tribunal Constitucional no declarara finalmente la inconstitucionalidad de los preceptos planteados por la Audiencia Nacional: «Si el Constitucional declara la constitucionalidad de esta disposición, tendría que dictarse una nueva norma con rango de ley para poder abordar los perjuicios causados por la suspensión, perjuicios que serían dificilmente superables y determinar las normas de constitucionalidad de un nuevo escalafón único».
Finalmente, Defensa apunta que «si la Audiencia Nacional no suspende el proceso, la reparición de los daños provocados a los oficiales de la Escala Superior es mucho más sencilla en el supuesto de una eventual inconstitucionalidad del precepto».

ABC